Por: Luis Silva Nole
Martes 7 de setiembre; 7:30 a.m. El potente ulular de la sirena que una unidad médica del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú hace sonar en medio de la insensible procesión de autos no hace efecto alguno. Ahí, en la inmensa cola de vehículos que van de sur a norte por la Costa Verde, los minutos parecen eternos y más si se está atendiendo una emergencia.
Viéndola desde lo alto, al borde del acantilado, en la cuadra 15 de Malecón Cisneros, en Miraflores, la escena parece sacada de una película de suspenso.
Un equipo de este Diario aprecia cómo el conductor, haciendo uso de las facultades que la ley otorga a los vehículos de emergencia, realiza algo radical: la ambulancia vira hacia la izquierda, ingresa al sentido contrario, acelera y se enfrenta a autos que vienen a gran velocidad. En medio de la congestión, no hay otra alternativa para salvar a alguien.
Pero los conductores particulares que en horas punta, como la de la escena, se ven atrapados en el lento caos de la Costa Verde cerca de la subida a la Av. del Ejército, no tienen esa opción y están obligados a esperar entre el mar y el acantilado.
Con el fin de erradicar esa imagen el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento y las municipalidades distritales de Miraflores y San Isidro invertirán en conjunto poco más de S/.5,6 millones para la construcción de una nueva pista.
La vía abarcará toda la zona costera de San Isidro y buena parte de la de Miraflores, tendrá tres carriles y cerca de 2 km de extensión, y servirá únicamente para los vehículos que van de norte a sur. El objetivo del proyecto es destrabar el flujo vehicular en la zona adyacente a la subida a la Av. del Ejército que en horas punta se torna casi nulo.
Al acabarse la obra, que se realizará en la parte más cercana al mar, la pista actual, que mayormente presenta dos carriles por sentido y en algunas zonas solo uno, será exclusivamente para ir de sur a norte. Es decir, en el mejor de los casos tendrá hasta cuatro carriles.
Eso, sumado a que el proyecto también comprende la eliminación del óvalo ubicado en la subida a la Av. del Ejército, dará como resultado, según explica Antonio Meier, alcalde de San Isidro, la eliminación del cuello de botella que retardaba en decenas de minutos el viaje costero de Chorrillos a San Miguel.
MEDIA HORA PERDIDA
El Comercio comprobó ayer el tiempo que se pierde en medio de la congestión. Partimos en la bajada de la Av. Huaylas, en Chorrillos, a las 8:25 a.m. Cinco minutos más tarde, poco después de las obras de mejoramiento que se realizan de la playa Tres Picos, ya en Miraflores, comenzó el caos. A la par, el sentido contrario lucía despejado.
Los autos, entre ellos la unidad móvil de este Diario, avanzaban a paso de tortuga. Llegar a bordear el óvalo para seguir hacia el norte fue muy difícil. Pero quienes se veían en la necesidad de subir hacia la Av. del Ejército la pasaron peor, en fila de uno.
El tramo hasta el límite entre San Isidro y Magdalena, justo donde está planeado que empiece la nueva pista también resultó una letanía. Llegamos a las 8:57 a.m. De ahí hasta el desfogue en la Av. Escardó, en San Miguel, el tránsito estuvo fluido. El reloj de nuestro vehículo marcaba 9:03 a.m. cuando estábamos, por fin, entre casas y negocios.
Conclusión: 27 minutos, casi media hora, de congestión playera entre San Isidro y Miraflores.
ANTES DE VERANO
Esa es la pérdida de tiempo que se busca eliminar con este proyecto. Según el ingeniero Carlos Elías Strohmeier, asesor del alcalde de San Isidro y quien ha estado en las últimas horas en conversaciones con el ministro de Vivienda, Juan Sarmiento, el plan es culminar las obras de la nueva pista a más tardar a fines de diciembre, pese a que el expediente técnico dice que se construirá en cuatro meses.
Manuel Masías, alcalde de Miraflores, sostiene que su concejo será el órgano ejecutor de la obra, cuyo expediente técnico ya se encuentra listo.
Más allá de que tanto él como Meier se atribuyan la iniciativa de haber promovido la inversión conjunta en este tema, lo cierto es que, tal como adelantara el ministro Sarmiento, el concurso para la adjudicación de la buena pro comenzará en 15 a 20 días.
Ambos concejos ya aprobaron sus respectivos desembolsos de dinero y están a la espera de que Vivienda haga explícita su parte de la inversión mediante una norma en el diario “El Peruano”.
“Ni la Empresa Municipal Administradora del Peaje (Emape) ni la Autoridad del Proyecto Costa Verde (APCV) tenían los recursos para este proyecto. Por eso lo asumimos y estuvimos detrás de él durante año y medio, y lo planteamos hasta a tres ministros de Vivienda. Acordamos con San Isidro y, finalmente, ya salió. La obra no solo servirá para mi distrito, sino para todos los usuarios de la ciudad”, refiere Masías.
Meier apunta que Vivienda tampoco tenía todos los recursos y que por eso se decidió por la inversión conjunta.
Igual que las mejoras que se realizan en Magdalena y San Miguel, la nueva pista coincide con el plan que pretende revalorar la costa entre Chorrillos y el Callao y que debiera articular la APCV, órgano descentralizado de la Municipalidad de Lima.
La página web de la APCV está en construcción y El Comercio solicitó a la oficina de prensa del concejo contactar con esa entidad, lo que no fue atendido.
“La obra se enmarca dentro del plan de Desarrollo Urbano y Ambiental del litoral de Lima y Callao. La ciudad debe volver la mirada hacia el mar”, sostiene el ministro Sarmiento.
MÁS DATOS
Enrique Valdivia, especialista en ingeniería de costas, dice que la obra es una solución parcial al problema del tráfico en la Costa Verde.
“Esta vía es intervenida por partes. Falta articular esfuerzos”, refiere. Señala que también se debe ampliar y semaforizar mejor el acceso a la Av. del Ejército, en la parte alta.
LAS CIFRAS
65.000 vehículos circulan a diario por los tramos de la Costa Verde de San Isidro y Miraflores.
6 distritos abarca esa vía (Chorrillos, Barranco, Magdalena, San Miguel y los antes mencionados).
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